Hoy hemos hecho una actividad que le ha gustado mucho a los niños.
He fabricado con foam unas bolas de Navidad especiales. Y digo especiales porque debajo de cada bola está la foto de los niños de la clase. Las bolas tienen una ranura de manera que sólo se les ven los ojos. El juego ha consistido en adivinar quién se esconde detrás de cada bola con sólo ver sus ojos.
Bueno, pues tengo que decir que en mi clase tengo unos detectives buenísimos. Han sido capaces de adivinar todas las bolas y casi sin dudar. En cuanto les enseñaba una...¡Contestaban! Y no se equivocaban.
Os puedo asegurar que no es tan fácil. Que yo tenía que hacer a veces trampa, porque dudaba un poco.
Luego, según adivinábamos una bola, el niño o la niña que aparecía en ella, tenía que colgarla en nuestro árbol de Navidad.
Os pongo unas fotos.
Y lo mejor de todo es que han seguido jugando ellos luego.
El árbol lo he sacado al pasillo, porque me gusta compartir las cosas con los niños de otras clases. Todos se han entretenido un rato tratando de contestar a la pregunta: ¿QUIÉN ESTÁ DETRÁS DE LA BOLA?
No hay comentarios:
Publicar un comentario