¡¡HEMOS PERDIDO EL NOMBRE!!

El otro día en clase leímos un cuento que nos dejó Alberto. Es un cuento personalizado que hicieron para su hija Vega. Se hace con un programa de internet. Os dejo el enlace:
LOSTMYNAME
En él se cuenta que Vega, al levantarse por la mañana, observa que su nombre ha desaparecido del cartel de su puerta . Va a buscarlo y aparecen diferentes personajes que le van dando las letras de su nombre.
¡Es un buen regalo para esta navidad!
Pues a raíz de este libro se me ocurrió hacer una actividad. Como en el programa puedes ver una vista previa del libro, yo fui "haciendo" uno para cada niño, para ver qué personajes aparecen con cada letra.
Un día por la mañana, les dije al entrar que no me acordaba de cómo me llamaba. ¡Oh, no, había perdido mi nombre!
Menos mal, que nuestra bruja mágica, la Bruja Maruja, me dejó una pista para encontrarlo.
Fuimos preguntando uno por uno a los niños para ver si ellos habían perdido su nombre. Como querían una pista ellos también, dijeron que sí, jejeje. Bueno.... a alguno le costó un poco más.
Pues cada uno con su pista empezó la búsqueda de su nombre. Tenían que buscar a los personajes que aparecían en el papel.

Álvaro nos enseña su pista.

Marcos mira a ver qué personajes
tiene que buscar. ¡Ha encontrado
al mago, que le dará la M!

Marta ha encontrado al águila.
Podrá coger una A.

Daniel encuentra a la elefanta, que
tiene una E para él.

Luego hemos ido pegando las
letras de nuestro nombre en el
cartel de la puerta.

Podemos decorar la puerta.
Muy chula, Laura.

La verdad es que es una actividad divertida y en la que se trabajan muchas cosas: lectura, observación, atención, secuencias,...
Además se dispara la imaginación de una manera... Lucía, después de pegar su nombre y colorear la puerta, volvió a enrollar su pista y como se quedaba del diámetro del pomo de la puerta de la ficha dijo: "Mira, Ana, ésta es la llave secreta que abre la puerta". ¡¡Me encanta!!
Cuando todos recibieron su pista teníais que haberlos visto. ¡Estaban emocionados! Comparaban unos papeles con otros y se oían voces diciendo: ¡Yo también tengo el águila! ¡Y yo el dragón!
Para rematar la actividad, se llevaron a casa el abecedario hecho con todos los personajes. Tuvieron que escribir (con personajes) el nombre de un compañero y luego....¡Descifrar un mensaje secreto!
Creo que se lo pasaron muy bien.